barrer cada letra -desproporcionarlas-
como si cada nutriente que asoma
celebrara tiempo
verterlas todas como copos de nadie
e inventarlas en abrigos
entrelazarlas al mundo ausente de la magia
para reabsorberlas como uvas
complicarlas hasta el vértigo labriego
que rememora entonces cada paso-sangre
bieninterpretarlas
asumirlas y lanzarlas casi
hasta reanimarlas
en la belleza inmensa de un cuerpo
que hasta no exudarlas
se estrechará hacia el sur de las presencias
como si nada
Gabriela Bruckner