a María y a Pancha
el cielo de noviembre se agolpa sobre un punto. no hay instante que resista. la palabra no nutre al silencio ni lo iguala. se desmayan los colores sobre el patio, lo tornan invencible. un hueso pide a gritos un poema y se esfuma en la sonrisa que no existe. todo ya no es todo. sobre el azulejo descansa una hormiga que no duerme. la brisa la empapa de sabores, y no duerme. otro cielo se almacena en la boca para enajenar un mundo. el sol se desviste y engulle a los pájaros. una cortina de polvo acaricia el aire, lo vuelve blando. los aromas se sumergen espesos en el tiempo y lo arrullan. se enciende una estrella sobre el telón de años. acumula en un punto la luz de una vida y se deshace
Gabriela Bruckner
No hay comentarios:
Publicar un comentario